TARTA DE QUESO QUARK

Cotilleando, cotilleando me encontré con  una receta espectacular.  Ya solo viendo la foto supe que me iba a gustar y no me he podido resistir a hacerla. El resultado es una tarta de queso muy jugosa y esponjosa. 

Ingredientes

500 gr de queso quark

125 gr mantequilla 

150 gr azúcar

3 huevos camperos L 

75 gr almidón de maíz (Maizena)

1/4 cucharada de cremor tártaro

1 cucharadita polvo de hornear 

1 cucharada de esencia de vainilla

2 cucharadas de  zumo de limón

1 cucharada de ralladura de limón

1 pizca de sal

Preparación

Prepara un molde redondo desmontable de 16-18 cm, engrasa las paredes con un poco de aceite y coloca papel de hornear en la base. Precalienta el horno a 170º

Separa las yemas de las claras para montar éstas a punto de nieve. Para ello échalas en un bol con una pizca de sal y el cremor tártaro (estabiliza las claras de huevo cuando se baten a punto de nieve aumentando su volumen y su tolerancia al calor). Bate hasta conseguir que queden bien firmes.  Si quieres ayudarte de batidora o robot de cocina perfecto. Reserva.

En otro bol bate la mantequilla en punto pomada con el azúcar  hasta que blanquee y quede esponjosa la mezcla. Incorpora las yemas de los huevos una a una mezclando suavemente. 

Añade el almidón de maíz mezclado con el polvo de hornear,  en dos o tres veces, removiendo bien para que se integren los ingredientes.

Aparte mezcla el queso quark con el zumo y la ralladura de limón y la pasta de vainilla. Remueve bien para que no queden grumos. Incorpora esta mezcla a la anterior con movimientos envolventes hasta que los ingredientes estén integrados.

Incorporar en dos o tres veces las claras a punto de nieve, suavemente y con movimientos envolventes.

Verter esta mezcla en el molde que teníamos preparado y hornear durante 45-55 minutos a 170º. Cuando hayan pasado 45 minutos abre con cuidado el horno y pincha la tarta con una aguja para comprobar si está o no lista.  Si sale limpia ya la puedes sacar del horno.  Si no es así déjala otros 10 minutos para que termine de hacerse.

Cuando la saques del horno, intenta despegar la tarta de las paredes para sacarla del molde y dejarla enfriar sobre una rejilla.

Espolvorea de azúcar glass cuando la vayas a servir. 

Si te apetece puedes acompañarla de una mermelada de frutos rojos que le va mucho.